sábado, 14 de mayo de 2011

Quinientas horas sin probar tus labios,
veinticinco millones de olas,
cuatro paredes, dos películas,
media lágrima
y te espero.

2 comentarios:

  1. de vez en cuando me acuerdo de tus poesías y vuelvo otra vez a caer en la tentación de leerlas de nuevo, nunca me canso, así que voy a dar la cara y a decirte que a partir de ahora sigo tus textos más de lo que lo hacia antes y de vez en cuando te dejaré un comentario diciéndote siempre que me encantan tus palabras. un abrazo

    ResponderEliminar